Ángel Custodio Cabrera: “Que entren todos, esto es hablar de democracia”
- Karen Pinto
- 20 nov 2017
- 11 Min. de lectura

En la oficina 622B del Senado, en reunión con un alcalde, se encuentra un senador que en toda su trayectoria política no ha tenido ninguna investigación judicial, él es Ángel Custodio Cabrera Baéz. El titular de curul y autor de 62 proyectos de ley nos habla del contenido y objetivo de algunos de estos, cómo pueden mejorar al país y cómo se relacionan con su vida personal.
Ángel Custodio Cabrera nace el 19 de julio de 1956 en la capital colombiana, a donde su madre, oriunda del municipio de Susacón – Boyacá – había viajado poco tiempo antes buscando mejores oportunidades, pero para cumplir este objetivo tuvo que dejar a sus tres hijos mayores en el municipio al cuidado de la abuela; mientras trabajaba en la capital conoce a un carpintero tolimense quien será el papá de Ángel Custodio Cabrera y posteriormente de trillizos, pero por desgracia familiar a muy corta edad uno de los hermanos menores muere.
Gran parte de su juventud la vivió en la localidad de Kennedy y aunque estuvo muy cercano a las drogas y a las pandillas, nunca entró a este mundo, es más, crecer involucrado en este ambiente le serviría de inspiración para crear políticas para ayudar a personas en estas situaciones de fragilidad social. Incentivado por su madre se dedicó a estudiar y se convirtió en el mejor Bachiller de su colegio, INEM Francisco de Paula Santander, en el año 1975.
Entró a la Universidad Nacional a estudiar contaduría pública, se gradúa y empieza su vida profesional siempre con una ideología política liberal. Uniendo los números y la economía con la labor política y social, en el año 1991 se empieza a desempeñar como empleado estatal convirtiéndose en el Director de la Regional Bogotá del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar.
Se casó hace 30 años y construyó su casa en Tabio, en la que vive actualmente con su esposa y un medio sobrino de ella. No tiene hijos pero no por esto es ajeno a la población más joven de Colombia, gran parte de su trabajo está enfocado en niños y adolescentes y es con ellos como muestra su sentido paternal.
Construir un nuevo país desde la infancia
Con altivez Cabrera dice que la ley de su autoría sobre las madres sustitutas es un proyecto excelente y tiene como objetivo “preparar mujeres en su hogar para recibir niños que son responsabilidad del estado; niños abandonados, con problemas de vulnerabilidad que no le permiten estar en su casa, entonces en convenio con cajas de compensación familiar se hacen capacitaciones pero con el proyecto de ley se busca ir más allá, buscar profesionalización en el trabajo que ellas realizan con el fortalecimiento en la parte educativa”.
No puede haber limites en la cantidad de madres sustitutas pues esto se determina por la problemática social del país “por cada niño abandonado hay una madre sustituta y deberían disminuir estas madres en el orden de ideas que bajen las estadísticas de niños abandonados, pero yo fui director del ICBF hace mucho tiempo y las estadísticas son pavorosas, al año se abandonaban seis mil niños y hoy la cifra no ha bajado” y para que estas madres desaparezcan es necesario que las políticas preventivas del Estado funcionen, deteniendo el deterioro de las familias, así algún día estas madres ya no sean necesarias.
Aunque este programa seguirá existiendo, no significa que ellas estén en un proceso permanente con el menor sino que los hogares sustitutos son procesos temporales de transición. “La madre sustituta debe tener al niño en una especie de temporalidad, primero la problemática del menor se trata con los equipos psicosociales del ICBF en la casa de la madre sustituta, por eso la madre tiene que llevar al niño con el psicólogo o el psicólogo va al hogar; el programa está diseñado para recuperar rápidamente al niño al seno del hogar”.
Es un programa con tiempos estipulados para que sea eficiente, no es una alternativa de adopción sino un proceso anterior de recuperación, aclarando que no todas las veces el destino del niño es esperar a ser adoptado sino la reincorporación a su hogar original. “Si los padres no existen o no les interesa, se declara en abandono y automáticamente pasa al programa de adopción. El niño no está de por vida en el hogar sustituto”.
Realmente el Estado es el papá del niño y entonces debe garantizarle su manutención, salud y demás, entonces, a través de las instituciones se entregan todas estas atenciones esenciales y el proyecto es que en sí el Estado se materializa en las madres sustitutas mientras la responsabilidad de un niño es adoptada por una nueva familia o la original recuperada.
La paz y jóvenes formas de pensar
Puede que no necesariamente sus ideas sean una motivación paternal sino una identificación con la juventud. Fuera de su vida política tiene varios hobbies que lo llenan de vitalidad, primero es un aficionado a la música, le encanta cantar en inglés eufóricamente en las reuniones familiares y sin ningún tipo de pena; tiene una gran colección de discos, y ha asistido a todos los conciertos en Colombia de legendarias bandas de rock.
En segundo lugar, pero no menos importante, e interesante, es un fanático empedernido del fútbol desde que era un niño ya que jugó en el ´Parque estadio Olaya Herrera´ con las inferiores de Millonarios y ahora es hincha fiel tanto de Millonarios Fútbol Club como del Fútbol Club Barcelona y de la Selección Colombia; opina que el deporte también es parte fundamental para que los jóvenes crezcan en un buen entorno.
A inicios de este año se anunció que la FARC (Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común) constituiría el club deportivo ´La Paz F.C´ en el que contarían con tres equipos profesionales de fútbol, uno para la categoría B, otro sub-20 y uno femenino. Lo interesante es que los jugadores serían guerrilleros desmovilizados, víctimas del conflicto y miembros de las comunidades que sufrieron la guerra, entonces con la cercana relación que tiene el Senador, así se pronuncia sobre este nuevo club deportivo de la FARC: “Buenísimo, eso es como la democracia, ¡participen! es qué o hacemos un país con exclusión o incluyendo al resto, que entren todos, esto es hablar de democracia, participar en lo cultural y en lo deportivo. El tema del fútbol son los que lo juegan y los que miran, y ahí si los hinchas sí son más directos porque si el equipo es regular… (risas) no lo acompañan”.
Para él es una idea magnifica ya que se relaciona con un poder que solo tiene el fútbol, el de unir personas, entonces es dar un paso más cercano a la reintegración social y tomar medidas para que el proceso de paz tenga efectos en la cotidianidad. Aunque el proceso de paz sea uno de los temas más tocados en la actualidad, la reinserción de exguerrilleros no es el principal inconveniente de fragilidad social. En un país como Colombia persisten graves problemas que germinan en la juventud y que dan como resultado la existencia de alrededor de ocho mil pandillas.
Entre los intentos que Cabrera ha hecho para lograr la inclusión hay dos proyectos de ley muy conocidos y con bastante éxito, el primero es el mencionado anteriormente sobre la protección de la infancia abandonada y el segundo está más dirigido hacia los jóvenes que pueden llegar a caer en manos de la calle.
Para hablar de este tema, Cabrera recuerda que en 2010 impulsó un proyecto que hoy en día ya es ley de La República, en que se buscaba promover acciones conjuntas entre diferentes sectores e instituciones para crear estrategias de inclusión social para los jóvenes con alto grado de fragilidad social y/o vinculados a pandillas.
Como es amante de la precisión no podía dar más detalles fiándose de su memoria, pues aproximadamente crea un proyecto de ley cada mes, entonces llama a Josué y a Melisa, quienes trabajan con él, para buscar el proyecto de ley y poder hablar con exactitud.
Ya con el documento en manos puede decir cuál es el foco de personas al que está dirigido y cómo opera: “Hay un grupo de jóvenes que buscan en la calle realizar actividades que prácticamente tocan el código penal, bajo ese contexto buscamos, en primer lugar, que se atienda a esa población, esto significa que la secretaria de integración les brinde más oportunidades a los jóvenes, a través de las diferentes entidades del Estado, donde la nación coordina, y a nivel territorial, en el caso de Bogotá, existe una institución que se llama IDIPRON y cuando yo fui concejal de Bogotá conocí un programa que se llama ´trapecistas y que era para acercar a los jóvenes, pero es principalmente un acercamiento físico, los educadores y trabajadores sociales van a la calle para hablar con estas personas, lograr atraerlos y ofrecerles otra alternativa de proyecto de vida”.
Pero el problema de muchos intentos distritales es que el proyecto termina ahí, impidiendo que se aparten totalmente de este mundo y al final sean reincidentes, el éxito del proyecto de ley es lo que va después de este primer paso. “El muchacho debe tener alternativas en lo que se denomina tiempo libre y oportunidades en educación como preparándolo en el Sena con educación para el trabajo, de tal manera que el muchacho se capacite y tenga oportunidades laborales”.
Aunque en el inicio se veía como un proyecto muy ambicioso por la dedicación constante en el desarrollo del proyecto de vida de personas en particular, se encontró otra manera (igual de ambiciosa) para conseguir el objetivo propuesto “El gran logro de la aprobación de la ley es que se busca una empresa que los reciba y más si es un primer un primer empleo, y a cambio yo le doy un incentivo tributario, es decirle a la empresa reciba al muchacho que está capacitado y reinsertado y que igual lo va a beneficiar; es mezclar la empresa privada para sacar adelante a estos muchachos. El Estado puede capacitarlos y quitarlos de las drogas pero si no se involucran al trabajo, fracasamos. Algo más importante es que para trabajar le piden tarjeta militar, pero acogidos a esta ley se excluyen del servicio militar”.
Desde ese momento el Ejército Nacional ofrece el apoyo a los jóvenes del ICBF con los trámites de regularización para la definición de su situación militar, y así tendrán la oportunidad de entrar a sus instituciones de educación superior con la posibilidad de empezar la carrera militar. Los efectos de esta ley se ven reflejados en hechos como que el 30 de septiembre se dio la entrega de 107 libretas militares a jóvenes bajo la protección del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar.
Aunque se vea que los resultados son muy beneficiosos lo más complicado es lograr atraer a estas personas y “es muy difícil porque muchas personas se lucran de eso, me refiero al ampón, jefe de microtráfico, ellos se lucran con el problema del joven, al inicio de cien personas se recuperaban cinco pero después de lo que pasó con el Bronx se rompió ese ciclo y ya del 100% se han recuperado el 60%, pero queda el 40% volando y se van para otro lado”.
Irónicamente, aunque el senador lidere el avance en educación nacional y logre resultados, con su familia no ha sido igual, le pagó el estudio a sus dos hermanos pero ninguno de los dos quiso terminar una carrera, aun así él les ayudó a conseguir trabajo, actualmente uno trabaja en la Registraduria y el otro tiene un delicado estado de salud. A mediados de los años 90´, en la época que estaba haciendo campaña para ser concejal de Bogotá, su padre muere, y para su sorpresa una señora se acerca llorando por su padre, Cabrera volteó y se encontró con la noticia de que tenía una medio hermana.
El actual presidente de la Comisión Sexta del Senado, fue presidente de la Comisión Tercera constitucional de la Cámara de Representantes, en esta se hablaba de forma permanente sobre presupuesto y se discutían temas de Hacienda, crédito público, impuesto, regulación económica y planeación nacional. Del paso por este cargo, conocidos suyos dicen que él es quien más sabe de presupuesto en todo el Congreso.
Su visión frente la crisis de credibilidad en la legitimidad del estado después de tantos escándalos de corrupción es optimista en la medida que el sistema judicial mantenga la claridad en que hay un problema de ética y moralidad en la evaluación de los que participan en la vida pública y que son actores de decisiones, entonces la solución para esto son las investigaciones y las sanciones.
En las elecciones legislativas de Colombia de 2006 fue elegido representante a la Cámara con 17.141 votos, posteriormente, en las elecciones legislativas de Colombia de 2010, fue reelecto representante a la Cámara con 34.029 votos, y en el año 2014 fue electo Senador de la República con 46.675 votos.
Después de pasar por tantas campañas y someterse a la elección popular esta es su visión acerca de las elecciones presidenciales del 2018: “Aún no hay un panorama claro de las presidenciales, es más, la gente todavía no sabe por quién votar, el país aún esta dividido en los que apoyaban al proceso de paz y los que no, entonces está esa incertidumbre de los resultados”.
Acerca de la ´moda´ de volverse candidato presidencial por medio de firmas cree que en realidad estar con el aval de un partido u otro es muy relativo. “Para mí, que hecho mucha política, me he dado cuenta que la gente vota por Ángel Custodio Cabrera, entonces la gente va a votar por Vargas lleras, por el que diga Uribe, por Claudia López, la gente va a votar por los nombres y luego sí se fijan en los partidos, es un tema más influenciado por practicidad legal”. Aunque al inicio no se creía mucho, sí puede llegar a ser más fácil hacer una campaña de forma independiente y por eso que ahora muchos deciden impulsar su postulación de esta manera.
“Se necesita la visión de un país diferente para crear un nuevo país”
Siendo parte de la Rama Legislativa y en medio de tantos cambios que se dan continuamente, tiene una visión de cómo se desarrollará la inclusión no social sino política, específicamente la del nuevo partido ´Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común´. “Si creemos en un proceso de paz significa que las personas dejen las armas y en lugar de buscar el poder vía armada lo busquen vía democrática, entonces bajo ese concepto uno tiene que aceptar que existe una nueva forma de pensar que va a fortalecer la democracia y yo estoy de acuerdo con eso; pero la discusión es que quienes vayan a representarlos no sean quienes han cometido delitos de lesa humanidad, o sea que los que lleguen al Congreso sean los representantes, limpios”.
Una discusión ya muy saturada desde antes del plebiscito era la participación política de la FARC y unos criticaban el número de curules en el Congreso, sobre esto el senador opina que: “Así sean 10 curules o las que sean no tiene que ver tanto el número sino que en el momento de debatir y tomar decisiones políticas ellos tiene la posibilidad de argumentar sus temas y presentar sus ideas y los demás, que son mayoría, dirán si sí o no, esto en ultimas ayudaría a la solución de los problemas del país porque la visión de país que tienen ellos, sobre todo del sector rural, es muy distinta y más clara, entonces su participación podría generar mejores decisiones para que nos beneficiemos todos los colombianos”.
Educación y reconocimiento
En la última semana de septiembre se cumplía el sesquicentenario de la Universidad Nacional, en simultáneo que en el departamento de Boyacá se iniciaba el paro de la universidad Pedagógica y tecnológica de Colombia (UPTC) también a pocos días del aniversario de la misma.
En conmemoración de los 150 años de la Universidad Nacional de Colombia, algunos egresados recibieron distinciones por su contribución a la institución y al país, entre ellos estaba el senador ángel Custodio Cabrera quien por “Aporte Significativo a la Universidad Nacional de Colombia” fue resaltada en su labor en el Congreso de la República, desde donde ha liderado leyes de carácter económico que han permitido la consecución de recursos, como haber gestionado los fondos para el Hospital Universitario de la Universidad Nacional.
Dadas las situaciones surge el interés por preguntarle sobre la educación pública en el país más específicamente sobre la UPTC y el paro en el que se encontraba debido a los rumores de su privatización, ante esto Cabrera dice: “Como egresado de universidad pública veo que hay un problema de desinformación. Me da la impresión que las universidades públicas a veces quieren trasladarle los costos a los estudiantes, porque bueno sí hay estudiantes que pueden pagar, pero hay otros que no tienen los medios, pero eso no se puede dar bajo ninguna circunstancia, se tiene que mantener lo más gratuito posible, pero esto se va a revisar en cuatro debates que se darán en los próximos días”.
El gobernador de Boyacá, Carlos Andrés Amaya en un comunicado dice que no hay déficit fiscal por lo cual no podía continuar el paro, que tan claro y oportuno es este pronunciamiento “Celebro que el gobernador atienda esto porque es una cuestión delicada, pero en sí la responsabilidad es de las directivas, ¿Para qué le suben a las matriculas? Una cosa es que le suban el IPC, pero ya recargarle de una manera inconsulta los costos al estudiante, no se puede, este no es el espíritu de una universidad pública, si la universidad tiene desfase debe primero pelear con el Ministerio de Educación, esa su responsabilidad”.
Por: Karen Pinto
karen.pinto01@est.uexternado.edu.co